Es un hecho: los créditos rápidos permiten solucionar problemas. En realidad, ése es el propósito para el que fueron creados originalmente: para cubrir necesidades puntuales de dinero, para llegar donde el bolsillo no alcanza y para solventar un imprevisto sin necesidad de pedir dinero a amigos o familiares.
Sin embargo, teniendo en cuenta la abrumadora cantidad de préstamos online y créditos rápidos disponibles hoy en día (todos los bancos y financieras los ofrecen), escoger el mejor producto para nosotros no siempre es tarea fácil. En este artículo arrojaremos un poco de luz al respecto.
Los minipréstamos: para pequeños imprevistos
Los mini préstamos y micro créditos son productos de importes bajos. Son ideales para cubrir una necesidad puntual, una urgencia, el pago de una factura o recibo atrasado, una compra indispensable, y un largo etcétera. Si necesitas menos de 500 euros, y sabes que podrás devolverlos a final de mes o al mes siguiente, los minipréstamos son tu mejor opción.
Además, podrás obtener el dinero de forma muy rápida, sin papeleos, y tendrás hasta 30 días para devolverlo. Si buscas en el comparador, encontrarás que muchas entidades ofrecen estos mini préstamos gratis, sin intereses ni comisiones, para primeras solicitudes de nuevos clientes. A partir de ahí, los intereses de este producto suelen rondar el 1% diario, y esto responde a su naturaleza de ser devueltos tan rápido como se consiguieron.
Préstamos rápidos y créditos a plazos: para importes elevados
A veces ocurre que los gastos que debemos realizar son mayores, y 500 euros no nos dan ni para empezar. Reparaciones del coche, reformas en casa, muebles, electrodomésticos, estudios o gastos médicos son buenos ejemplos de estos casos.
Lo ideal en estas circunstancias es buscar préstamos rápidos, créditos a largo plazo o préstamos personales que te permitan conseguir hasta 3000 euros o incluso 5000 euros o más. El plazo de devolución también es mayor, puede ir desde varios meses hasta cuatro o cinco años, para que las cuotas tengan una medida cómoda y asumible.
Los intereses varían ampliamente dependiendo de la entidad, de las condiciones del producto y también de las circunstancias personales: una nómina permite pedir más dinero en los préstamos personales, pero se pueden pedir préstamos sin nómina y aportar un aval. Los créditos con ASNEF brindan financiación a personas en ficheros de morosos, pero pueden hacerlo a un coste algo superior, dependiendo del perfil de riesgo de la entidad.
Líneas de crédito: el camino a la tranquilidad hoy y mañana
Finalmente, si lo que necesitas no es tanto una cantidad puntual ahora, sino saber que dispones de una liquidez durante todo el tiempo, puedes contratar una línea de crédito. Las líneas de crédito marcan un límite de dinero que la persona titular puede utilizar y retirar a demanda.
Una vez se devuelva ese dinero, se puede volver a disponer de él. Las líneas de crédito son flexibles, se puede retirar distintas cantidades en cada momento e irlo devolviendo según convenga. En las líneas de crédito es importante conocer bien las condiciones de comisiones e intereses, para saber si, por ejemplo, se nos cobra comisión cada vez que retiramos dinero, ya que no todas las líneas de crédito lo hacen. Las líneas de crédito permiten disponer de entre 500 euros y 5000 euros o más en plazos que pueden alcanzar varios años.
Yo soy Vicente Fleites - 10 años de experiencia en planificación de finanzas personales. Soy garante de la calidad informativa del español en PrestamosFrescos. Mas informacion...